13 de abril de 2011

Experimentos psicologicos III

Anatomía del pánico de las masas: La guerra de los mundos.

Los hechos se relataron en forma de noticiario, narrando la caída de meteoritos que posteriormente corresponderían a los contenedores de naves marcianas que derrotarían a las fuerzas norteamericanas usando una especie de "rayo de calor" y gases venenosos. La introducción del programa explicaba que se trataba de una dramatización de la obra de H. G. Wells; en el minuto 40 aproximadamente aparecía el segundo mensaje aclaratorio, seguido de la narración en tercera persona de Orson Welles, quince minutos después de la alarma general del país, que llegó a pensar que estaba siendo invadido.
En la emisión de La Guerra de los Mundos Welles interpretaba al profesor Pierson, el científico que explicaba lo ocurrido, mientras que también participaba un actor imitando al periodista Carl Philips. La emisión empezaba así:
"Señoras y señores, les presentamos el último boletín de Intercontinental Radio News. Desde Toronto, el profesor Morse de la Universidad de McGill informa que ha observado un total de tres explosiones del planeta Marte entre las 7:45P.M. y las 9:20P.M"
Inmediatamente pasaban a la banda de música supuestamente desde el Hotel Park Plaza, y periódicamente la interrumpían para informar de la ficticia invasión marciana. Una de las intervenciones del personaje Carl Philips desde Grovers Mill, Nueva Jersey, era:
"Señoras y señores, esto es lo más terrorífico que nunca he presenciado... ¡Espera un minuto! Alguien está avanzando desde el fondo del hoyo. Alguien... o algo. Puedo ver escudriñando desde ese hoyo negro dos discos luminosos... ¿Son ojos? Puede que sean una cara. Puede que sea..."
Los oyentes que sintonizaron la emisión y no escucharon la introducción pensaron que se trataba de una emisión real de noticias, lo cual provocó el pánico en las calles de Nueva York (donde supuestamente se habrían originado los informes). La comisaría de policía y las redacciones de noticias estaban bloqueadas por las llamadas de oyentes aterrorizados y desesperados que intentaban protegerse de los ficticios ataques con gas de los marcianos. Al día siguiente saltaron protestas exigiendo responsabilidades y una explicación, de modo que el propio Orson Welles pidió perdón por la broma de Halloween, considerada una burla por los oyentes.



En la mesa de negociación: las amenazas no funcionan.

Los investigadores Morgan Deustch y Robert Krauss pusieron a prueba dos factores involucrados en formación de acuerdos entre humanos en 1962: comunicación y amenazas. En este complicado experimento económico se descubrió que las relaciones de cooperación mutua entre personas son mucho más beneficiosas para ambas partes que las amenazas, ya sean acuerdos unilaterales o bilaterales.
 Esto no sólo ocurre en la sala de juntas, o cuando pedimos audiencia a nuestro jefe, sucede cada vez que se quiere llegar a un acuerdo con alguien. Por ejemplo, una tarea tan simple como escoger el canal de televisión. Porque, tanto a pequeña como a gran escala, la negociación es una parte fundamental de nuestras vidas.

Comportamiento humano bajo situaciones de riesgo

Daniel Kahneman y Amos Tversky estudiaron el proceso de decisión durante situaciones de alto riesgo y tensión. Postularon una teoría que les valió un Premio Nobel y fue usada para desarrollar y predecir modelos económicos e influyentes campañas de márketing.
Según el marco en el que se presente una misma situación, la gente se puede comportar de forma diametralmente opuesta. Por ejemplo, si se presenta en términos de pérdidas, más gente estará dispuesta a aceptar más riesgos, es decir, cuando se cree que va perder, el individuo es capaz de arriegar mucho más que en términos de ganancias. Esta teoría, denominada teoría de las perspectivas, por ejemplo, tiene una de las siguientes manifestaciones en la conducta humana: un individuo prefiere no perder 100 euros antes que ganar 100 euros, lo cual supone una asimetría en la toma de decisiones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario